CITADEL, producida por los hermanos Anthony y Joe Russo, las mentes maestras detras de Infinity Wars y Endgame, pero realmente fue creada por Josh Appelbaum, Bryan Oh y David Weil para Prime Video, protagonizada por Richard Madden y Chopra Jonas que dinamizan por seis episodios de una hora cada uno, con un presupuesto que sobrepasa los 300 millones de dólares.
CITADEL, no es solo una serie, es toda una industria del entretenimiento que se acaba de poner en marcha, acaba de ser renovada para una segunda temporada, y ya se han puesto en marcha spin-offs con diferentes actores, en diferentes idiomas y locaciones que incluyen los Alpes italianos, India, España y México.
Está haciendo historia, pero con todo ese presupuesto, uno podria imaginar que el equipo creativo podría permitirse una historia más original. Ésta se parece extrañamente a The Long Kiss Goodnight, un infravalorado thriller del 96 protagonizado por Geena Davis como una maestra escolar que no recuerda sus años como superespía hasta que redescubre su habilidad para matar a los malos sin piedad.
CITADEL te atrapa desde la primera escena, Priyanka Chopra Jonas, interpretando a Nadia Sinh, con un vestido rojo que combina con sus labios, se sube en tacones a un tren a toda velocidad y se une a Mason Kane, interpretado por Richard Madden.
CITADEL redobla la apuesta con la amnesia, tanto Mason como Nadia han tenido sus recuerdos borrados desde hace ocho años, mientras siguen sus vidas normales bajo sus identidades secretas.
La misión es recuperar el maletín X, el cual contiene los códigos de todas las armas nucleares del mundo, es una misión seria, pero la aniquilación mundial pasa a un segundo plano ante las chispas eróticas que desprenden los protagonistas mientras se abren camino a golpes, patadas y balazos entre decenas de maleantes justo antes de que una explosión haga saltar al tren de las vías, junto con los espías.
Es entonces cuando su jefe, Bernard Orlick, interpretado por el estupendo Stanley Tucci, aparece para recordarles que trabajan para CITADEL, una agencia de espionaje no partidista dedicada a la paz mundial. Los necesita ahora, porque Manticore, un consorcio criminal formado por ocho familias multimillonarias, dirigido por Dahlia Archer, interpretada por Lesley Manville, quiere destruir CITADEL para siempre.
Mason ha pasado ocho años en un pequeño pueblo de Oregón, entrenando al equipo infantil de su hija, no puede creer que sea un espía, ni tampoco Abby, su esposa, interpretada por Ashleigh Cummings, quien se burla, ¿No puedes bajar la tapa del escusado y ahora eres Jason Bourne?. Tiene un punto valido, la confianza es el principal problema de CITADEL, no hay nadie confiable, pero eso es lo que mantiene al espectador cautivo.
Dado que la serie reutiliza viejos clichés del espionaje, la presión recae sobre los actores para que aporten esos fuegos artificiales de acción, Madden, de 36 años, demuestra por qué es un firme candidato a ser el próximo James Bond, mientras que Priyanka Chopra, de 40 años, ex Miss Mundo, tiene buena presencia en la pantalla con una buena interpretación.
Aunque la crítica especializada ha tenido reseñas contradictorias, pero todo lo que la mayoría de los espectadores quieren es una serie con acción alucinante, y en ese sentido CITADEL cumple. Ya se puede disfrutar en Prime Video.
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